20/12/12

¿Sabias que...? La sombra.


Me ha pasado que al impartir un curso y hablar de la sombra (esa parte de nosotros negada y no reconocida), algunas personas han manifestado no saber lo que era, y otras me han dicho que carecían de ella.
Hoy quiero acercar el concepto de la sombra a los que me leéis, y que como algunos de mis clientes quizás no tengáis muy claro lo que es. ¿Por qué?
(El dibujo es de Almudena Cock a Doodle Doo)
En muchas de mis entradas hablo de esa parte nuestra y de lo importante que es explorarla para evolucionar y crecer. Hay muchas cosas nuestras que no sabemos que son nuestras, y es más, realmente estamos convencidos de que no tienen nada que ver con nosotros. 
¿Pensáis que un bebé cuando nace se siente imperfecto o inadecuado?
¿Habéis pensado lo importante que es para él ser querido, valorado y aceptado por los seres que ama?
¿Que sucede cuando hay algo suyo, de su cuerpo o de su forma de ser y actuar que el cree que no gusta a los demás?
¿En que instante de nuestra infancia comenzamos a pensar que hay partes nuestras que son un obstáculo para ser queridos y aceptados?...
Es así como un niño comienza a crearse una imagen simplificada de si mismo, el ego, formada por las partes que piensa que son él... con unas va a sentirse valioso y querido, y las querrá potenciar y mostrar... y otras las vivirá como defectos y querrá mejorarlas y disimularlas.
Y también es así como comienza a crear paralelamente la sombra, formada de todas las partes de él que piensa que le impiden ser querido y valorado, y que serán las que querrá esconder y negar.     
Y todo ello reforzado por su entorno familiar y cultural... una especie de sopa de creencias y valores con la que nuestra sociedad intentará "moldearle".
Es decir, en el saco de la sombra el niño pondrá todas aquellas partes suyas que quiere negar y ocultar incluso a si mismo, creando su sombra al reprimir todo eso y querer apartarlo de él... al hacer esto intentará “dividir su totalidad” en dos partes: la parte que quiere serla parte que no quiere ser...
Todo esto lo hará de forma paulatina e "inconsciente", como un recurso de supervivencia y adaptación al entorno para recibir amor, y que se irá produciendo en su día a día sin que él sea consciente de ello... por eso hablamos del "inconsciente" como de esa parte que influye en nosotros sin que nos demos ni cuenta.  .
¿Qué mensaje nos está enviando nuestra sombra desde el inconsciente?... simplemente que tenemos algo malo, que no somos perfectos, que no merecemos ser queridos... que no valemos la pena... que no merecemos nada... 
¡No es extraño que no queramos abrir el saco de la sombra!... ¿cómo vamos a querer mirar "eso" tan horrible que somos? eso que nos hace indignos de amor... 
Así es como reprimimos sentimientos y pensamientos que nos da miedo tener, intentando ocultarlos profundamente dentro de nosotros ... 
Pero la realidad es que esos sentimientos y pensamientos  siguen siendo "nosotros", y de una forma u otra se manifestarán en nuestra vida, que al fin y al cabo es "nuestra vida" y como tal estará impregnada de “nosotros”, es decir de la parte que queremos ser y de la parte que no queremos ser, porque nos guste o no, seguimos siendo una totalidad, como las dos caras de una moneda... o las dos caras de la luna (un símbolo de nuestro inconsciente). 
La forma como contemplamos lo que nos rodea, las personas y el mundo, es nuestra forma particular de hacerlo, y cada uno tenemos una forma diferente, “la nuestra”,  y esa forma hablará de nosotros: de lo que pensamos y sentimos, de nuestras creencias y nuestros valores, de nuestra historia familiar, de nuestra genética... y también de lo que queremos ser y de lo que no queremos ser... y así es como manifestáremos nuestra sombra en lo que nos rodea, como un reflejo en las anécdotas y acontecimientos de nuestra vida, en nuestra familia, en nuestros amigos y en los desconocidos.  
Pero nosotros no nos damos cuenta de esto, y negamos nuestra sombra con mucha intensidad, tanta que llegamos a olvidarnos de ella, creándonos una especie de "disfraz" o "máscara", una imagen idealizada para mostrarnos al mundo, el ego, un disfraz que nos creemos a pies juntillas, engañándonos a nosotros mismos e intentando, sin querer, engañar a los demás.
¿Y sabéis lo más importante? Que todo eso que negamos, en realidad no es ni bueno ni malo, sólo son aspectos del “Ser” que se pueden usar de diferentes maneras, y es el uso que hagamos de ello lo que hará que sean actos positivos o negativos para nosotros y los demás. 
Estos aspectos nuestros que vemos como negativos, realmente ocultan un don, sólo tenemos que aprender a aceptarlos y a usarlos de la forma adecuada, porque aquello que rechazamos en nosotros, es una potencial fuente de riqueza a nuestro servicio.
Esas partes negadas nos impiden vivir una vida plena, aparte de generarnos un sentimiento inconsciente de vergüenza y de indignidad.
Así que cuando nos integramos y vamos recuperando esas partes, nos liberamos de culpa y nos enriquecemos al aportar determinadas cualidades a nuestro bagaje vital... además de dejar de proyectarlas en los demás de una forma enjuiciadora y culposa... la integración nos generará relaciones más sanas, gratificantes y nutritivas... y todo esto nos lleva a la Ley del Espejo que rige nuestra vida, y de la que muchas personas son inconscientes... 
Espero que estos pequeños apuntes hayan sido de utilidad para algunos de vosotros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...